Proyecto de Vida Sostenible

CASA surge de la necesidad de mejorar los planes de reasentamiento poblacional. Un grupo interdisciplinario de la PUCP trabaja directamete con la población de Nuevo Belén en busca de entender sus necesidades y plantear soluciones sostenibles.

Por NANCY VARGAS

La zona baja de Belén está ubicada en las orillas del río Itaya en Iquitos. El territorio, propenso a las inundaciones, es hogar de miles de familias. Los habitantes de Belén están acostumbrados a transportarse en balsas, a través de sus casas, con paredes hechas de madera y techos hechos de palmera, que parecen suspendidas sobre el río.

En diciembre del 2014, el gobierno declaró en estado de emergencia a Belén. Con el objetivo de reubicar a la población, el Ministerio de Vivien-da Construcción y Saneamiento comenzó a construir, en el 2016, una ciudad en una zona alejada de la crecida del río: Nuevo Belén. Es así que ofreció terrenos de 120 metros, con casas de 40 metros cuadrados para 16,000 habitantes.

CIUDAD DE AGUA.
 El barrio de Belén, en Iquitos, durante la época de inundaciones por la crecida del río Itaya.

En este contexto nace el proyecto Ciudades Auto-Sosteni-bles Amazónicas (CASA), que es una iniciativa del Centro de Investigación de la Arquitectura  y la Ciudad (CIAC) de la PUCP, del Instituto de Ciencias de la Naturaleza, Territorio y Energías Renovables (INTE-PUCP), y la Unidad de Planificación para el Desarrollo de la University College of London (UCL).

El proyecto CASA investiga  y analiza los procesos de reasentamiento poblacional, lo hace tomando en cuenta aspectos propios y saberes de la población con la que trabaja. De esta manera, se preocupa por evaluar las relaciones sociales de los habitantes, sus actividades económicas y la situación ambiental que rige su manera de vivir.

La Mg. Belén Desmaison, coordinadora de CASA y docente del Departamento de  Arquitectura de la PUCP, comenta que, para el caso concreto de Nuevo Belén, el grupo pretende “promover no solo acciones arquitectónicas-urbanas, sino también sociales y económicas que incentiven la autosuficiencia en el contexto amazónico. A pesar de que la autosostenibilidad del proyecto es una visión utópica, es el objetivo al que nos gustaría llegar”, comenta Desmaison. 

MODO DE VIDA.
 Los habitantes de Belén adaptaron sus estilos de vida según las épocas de inundación. La contaminación es uno de los grandes problemas.

Asimismo, el docente del Departamento de Arquitectura Kleber Espinoza, miembro del grupo de trabajo CASA, señala que el proyecto propone “una visión nueva al modelo de ciudad en la Amazonía”.

Esta zona amazónica tie-ne características especiales, distintas a Lima y a otras ciu-dades del país, explica Des-maison: “Es uno de los pocos casos en el Perú, y probablemente en Latinoamérica, en el que el modo de habitar de los pobladores se rige a partir del manejo de las temporadas inundables y no inundables”.  Además, los pobladores tie-nen un sentido de movilidad  y longevidad distinto.

Los habitantes tienen un desplazamiento muy exten-so. “Están en Belén, luego se  van kilómetros más allá en el río para recolectar frutas, sa-lir de pesca, y luego vuelven a Belén y a la ciudad para actividades de comercio”, comenta la coordinadora del proyecto. La costumbre de vivir en zonas inundables y su habitual desplazamiento extenso ha hecho que su interacción con el territorio sea constante, lo que ha determinado su estilo de vida.

REASENTAMIENTO

El plan de reasentamiento poblacio-nal consiste en que antes de que suceda un desastre, a modo de prevención, se decide reubicar a la población. Belén Desmaison precisa que “esta acción termina siendo más económica que el reasenta-miento posdesastre”. Cuando el Estado determinó que el barrio de Belén se encontraba en zonas inundables y estaba en peligro, se decidió reubicar a miles de familias.

 En Nuevo Belén, zona donde está siendo reasentada la población, es donde el proyecto CASA aplica sus investigaciones interdisciplinarias.

La reubicación se realizó en una zona alejada del río Itaya. Los arquitectos Desmaison y Espinoza precisan que el plan se realizó “siguiendo un modelo de ciudad completamente reduccionista y simplísimo en que las viviendas son de un solo tipo, hechas de un material que la gente de la zona normalmente no utiliza”. Además, el terreno donde están siendo reubicados “ha destinado el 25% del espacio a pistas, a pesar de que la mayoría de la población no utiliza carros”, precisa Desmaison.

Uno de los propósitos de CASA es comparar las estruc-turas promovidas por el Esta-do con las recomendaciones, los modelos y lineamientos que la investigación obten-ga. “Al no tener el contexto en consideración, se crean con-flictos sociales y rechazo de la población frente a los proyec-tos de reasentamiento”, pre-cisa Desmaison y agrega que, “al encontrarnos frente a una situación de cambio climáti-co, cada vez será más necesa-rio reasentar a personas”. Por ello, más que criticar, se debe empezar a “indagar cuáles po-drían ser los componentes que deben ser incluidos en los mo-delos de reasentamiento”. De esta manera, lograrán su objetivo, que es “mejorar la cali-dad de vida de las personas y reducir los niveles de vulnerabilidad y riesgo ante fenómenos naturales”, comenta la arquitecta.

El proyecto CASA se desarrolla alrededor de cuatro te-máticas: gestión comunitaria  y social, tecnologías apropia-das, diseño urbano y arquitectura. Es a partir de estos lineamientos que salen las recomendaciones hechas por el grupo de investigación, que apuntan a construir una nue- va y mejorada ciudad.

ENFOQUE INTERDISCIPLINARIO.

Parte del equipo que lidera la Mg. Belén Desmaison

La Mg. Urphy Vásquez, investigadora del INTE-PUCP y docente de Ciencias Sociales, señala que CASA es un proyecto que “parte de un componente arquitectónico de espacios públicos, que, al tener a la población como actor principal, trabaja bajo un enfoque sistémico y holístico”. “Nosotros buscamos que CASA se convierta en un proyecto transdisciplinario, esto quiere decir que los actores no académicos puedan formar parte de esta propuesta para generar un efecto y un impacto positivo”, indica Váquez, quien considera que este enfoque es necesario para generar incidencia pública.

En este sentido, la socióloga e investigadora del INTE-PUCP, Karina Castañeda, precisa que CASA trabaja en conjunto con la población de Nuevo Belén y con el Ministerio de Vivienda Construcción y Saneamiento, además “existe un diálogo constante con los gobiernos locales, con el Gobierno Regional de Loreto, la Municipa-lidad Provincial de Maynas, la Municipalidad Distrital de Belén, la Municipalidad Distrital de San Juan Bautista, con las universidades locales e, incluso, con otros grupos de investigación y profesionales especialistas de la PUCP”, comenta.

CASA no es solo investigación, es un proyecto que plantea líneas de acción. La intención del proyecto es que las propuestas no aterricen de la noche a la mañana y lleguen en un formato de informe a las municipalidades, sino que estas estén al tanto de lo que se está haciendo y sean parte del proyecto. Entre los investigadores que conforman el equipo del Proyecto CASA están, por la PUCP, Belén Desmaison, Karina Castañeda, Urphy Vásquez, Kleber Espinoza, Pablo Vega Centeno; y de la University College of London, Camillo Boano y Giovanna Astolfo

Publicado originalmente en Punto.Edu – Año 13, Nº 419